09/10/2020 / Guillermo Rodríguez

La distribución farmacéutica en la era COVID

En la distribución farmacéutica hemos afrontado la tensión que experimentó la cadena sanitaria en España y en todo el mundo, debido a la súbita aparición del nuevo virus entre la población, la evolución rápida y mortal con la que la enfermedad se extendía a lo largo de toda la geografía española, la carencia puntual de productos (que además pasaron por diferentes estados de recomendación de uso por parte de las autoridades sanitarias) o los bulos o situaciones de pánico que hacían que la población acaparase o demandase medicamentos o productos sanitarios sin base científica.

La distribución, en un primer momento, agotó en unos pocos días los stocks de seguridad que tenemos en los almacenes (2-3 meses), al incrementarse la demanda de las oficinas de farmacia hasta un 4.000% de sus necesidades estadísticas. Esa misma demanda se trasladó a los proveedores habituales, pero su stock de seguridad se terminó también en pocos días o estaba ya mermado por la situación global. Esto hacía imposible conseguir ningún artículo en el mercado internacional, sobre todo aquellos como pueden ser las mascarillas. El 90% de su producción es china, pero es en este país donde primero se detecta la enfermedad, por lo que paralizó la producción de gran cantidad de estos artículos y usó la existente para consumo propio.

Artículos

Los principales artículos en los que se ha centrado la actividad principal y esfuerzo de abastecimiento han sido:

  • Mascarillas (en Cofares pasamos de un requerimiento de 30.000 anuales a suministrar en un solo día 2,5 millones).
  • Guantes.
  • Geles hidroalcohólicos.
  • Alcohol y antisépticos.
  • Otros sistemas de protección (pantallas, mamparas...).
  • Termómetros.

Pero no podemos olvidar que, en función de las noticias que aparecían en los medios de comunicación a diario, la demanda de la población se derivó de manera acaparadora esporádica hacia algunos analgésicos y antipiréticos, antiinflamatorios, antibióticos, antiasmáticos, antipalúdicos, hipnóticosedantes, anestésicos generales o corticoides, con principios activos tan conocidos como el ibuprofeno, paracetamol, metamizol, dexametasona, claritromicina y azitromicina, acetilcisteina o heparinas de bajo peso molecular. Esto provocó que se rompiese la línea de normal de previsión de demanda que tenemos en estos artículos, que si bien no cayeron en falta de manera generalizada, sí ocasionaron tensiones puntuales.

COFARES como caso práctico

COFARES, como distribuidora líder en España con almacenes presentes en todas las comunidades autónomas, una cuota de mercado próxima al 30% y con el operador logístico FARMAVENIX, percibió rápidamente la gravedad de la situación y movilizó todos los recursos humanos y materiales necesarios para poder amortiguar los impactos lo antes posible. Todo ello sin perder de vista que, como empresas sanitarias que somos, las entidades de distribución debíamos garantizar que el producto puesto a disposición de las oficinas de farmacia cumplía los estándares de calidad y legales de ámbito sanitario. Las áreas de Dirección Técnica, Compras y Auditoría Interna supervisaban diariamente la evolución de stocks y la demanda para adecuar los filtros a los distintos productos COVID, con el objetivo de garantizar el acceso de todas las farmacias a este tipo de producto y un reparto equitativo. En el periodo de marzo a junio, COFARES compró 81,4 millones de mascarillas de diferente tipo, sobre todo quirúrgicas y FFP2, o 36,6 millones de guantes, por ejemplo. Encontrar el producto adecuado en el mercado libre internacional muchas veces fue una actividad estresante y con riesgos al no ser el ‘terreno de juego’ habitual nuestro.

Dentro de la colaboración con las autoridades sanitarias, se ha apoyado la distribución y reparto a la población de mascarillas de las comunidades autónomas de Aragón, Castilla-La Mancha, Cataluña, Comunidad Valenciana, Galicia y Madrid a través de la oficina de farmacia. Puesto que los servicios de farmacia hospitalarios incrementaron su demanda de medicamentos y material sanitario, se duplicaron las rutas de servicio a los mismos o se crearon nuevas rutas ad-hoc, por ejemplo, para servir al hospital que se montó en IFEMA.

Dirección Técnica revisaba las características del género que adquiríamos, en función de las buenas prácticas de distribución (debido a la validación de proveedores que debemos hacer), y después, la revisión de la normativa propia del producto. Por ejemplo, en función de la tipología de la mascarilla que nos ofertaban se requería ficha técnica, etiquetado completo (caja, bolsa, instrucciones según aplique), imagen de la mascarilla (con marcado si procede), imagen del producto en 3D (catálogo web), D.Fab.Dir.93/42/CEE, D.Fab.UNE-EN 14683:2019+AC:2019, D.Fab. GB2626(KN95), TEST REPORT GB2626 normativa china, Autorización temporal de comercialización de la CCAA, CE ON R.425/2016 y EN 149:2001+A1:2009, D.Fab. R..425/2016 y EN 149:2001+A1:2010, TEST REPORT R..425/2016 Y EN 149:2001+A1:2010, D. Fab. UNE 0064-1 /UNE 0064-2/UNE 0065 o TEST REPORT UNE 0064-1 /UNE 0064-2/UNE 0065.

Stoppers

Y podemos ver las distintas tipologías de dificultades que nos hemos encontrado de manera general. Son estas:

  • No se han facilitado autorizaciones temporales para la distribución y venta en farmacia por parte de las Direcciones Generales de Industria de ninguna comunidad autónoma hasta este momento (tipo KN95).
  • Cambios constantes de legislación y normativa (China – UE – España).
  • Documentación no autorizada: organismos notificadores ilegales, test report de calidad no trazables, fallos de etiquetado (CE, uso no médico).
  • Mascarillas quirúrgicas: mal etiquetado, falta de trazabilidad, CE dudoso, test report: incumple, normativa derogada.
  • Mascarillas KN95 (EPIS): organismo notificado falso, CE falso, etiquetado defectuoso y los 4 que cumplían todos los requisitos han pedido la autorización de comercialización temporal a la Dirección General de Industria en distintas CCAA, y no han recibido respuesta.
  • Mascarillas Higiénicas: mal etiquetadas, fallos en test report.
  • Guantes: de 16 revisados solo han sido aceptados 2. El resto fue eliminado por problemas de etiquetado, normativa derogada o carecer de declaración de conformidad.
  • Termómetros: más de 20, problemas desde etiquetados, sin declaración de conformidad, sin CE Solo han pasado el filtro 5 productos.
  • Alcohol: al proceder de un producto natural (remolacha, caña de azúcar…) ha sido imposible aumentar su producción sin haberlo previsto con anterioridad. Al estallar la crisis en marzo, las producciones existentes no fueron capaces de asumir la demanda. El consumo del alcohol de enero a mayo ha sido igual a dos veces todo el del año 2019. Los proveedores no eran (ni son) capaces de conseguir encontrar material para abastecer la demanda actual.

En cuanto a las dificultades que encontró el departamento de Compras, son las siguientes:

  • Escasez de materias primas.
  • Volatilidad de los precios.
  • Confiscación de pedidos en la aduana.
  • Bloqueo de aduanas por saturación de operaciones y cambios legislativos en China.
  • Al afectar la COVID al resto de mundo, hubo una alta demanda de todos los países.
  • Dificultad para conseguir espacio y precios de la logística área.
  • Seguimiento exhaustivo de pedidos (vuelos, camiones…).
  • Proveedores oportunistas externos al sector farmacéutico.

Dificultades en supply-chain:

  • Refuerzo de personal por sobrecarga de trabajo producto de la pandemia.
  • Refuerzo de vehículos y rutas antes mencionados.
  • Priorización de gestión en los almacenes del género relacionado con COVID.

Dificultades en recursos humanos:

  • Personal de oficinas y administración en teletrabajo. Creación de los protocolos de teletrabajo en tiempo récord para que no se paralizase la administración y las finanzas de la empresa.
  • Implantación de medidas de seguridad en almacenes para personal presencial: geles, mascarillas, separación de turnos…

Pero frente a todo ello, y con el apoyo al 200% de todos los trabajadores de COFARES, se hizo frente a la situación. Sirva como ejemplo que el pasado mes de abril, Cofares contribuyó de manera notable a paliar la situación de desabastecimiento de mascarillas, ocasionada por el fuerte incremento de la demanda mediante el cierre de una compleja operación comercial, gracias a la cual, está distribuyendo de forma gradual mascarillas a través de las farmacias. Hasta la fecha, se han repartido un total de 40 millones de mascarillas, satisfaciendo así la demanda de este producto, que ha llegado a convertirse en un artículo de primera necesidad. El compromiso de la cooperativa es suministrar paulatinamente hasta 140 millones, de tal modo que se facilite el abastecimiento en estos meses de incertidumbre que están por venir. De hecho, durante el Estado de Alarma, se abrió la posibilidad de repartir no solo a las farmacias Socias de COFARES, sino a toda aquella que quisiera abastecerse de productos para COVID.

Epílogo

En resumen, la distribución farmacéutica en general, y COFARES en particular, han sufrido la presión que ha conllevado y conlleva la pandemia por COVID, intentando encontrar productos que cumplan con todas las garantías y normativas de calidad. Los farmacéuticos de distribución hemos trabajado jornadas interminables para asegurar la calidad de estos productos y para que las farmacias estuviesen permanentemente abastecidas de todos los demás medicamentos, pues las patologías del resto de los pacientes no han desaparecido por la irrupción del COVID en nuestras vidas.

Datos del autor
Nombre Juan Jorge Poveda Álvarez
Empresa Grupo Cofares / Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid
Cargo Director del Gabinete de Dirección / Vocal de Distribución
Utilizamos cookies propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarte publicidad personalizada a través del análisis de tu navegación, conforme a nuestra Política de cookies.
Si continúas navegando, aceptas su uso.


Más información

Política de privacidad | Cookies | Aviso legal | Información adicional| miembros de CEDRO