Todo aquel que haya participado en el desarrollo y ejecución de un proyecto de construcción coincidirá en una serie de tópicos como “el proyecto no era bueno”, “la constructora nos ha dado muchos problemas”, “nadie tuvo en cuenta los accesos”, “cualquier cambio nos ha generado un retraso importante”, etc. En definitiva, el modelo tradicional (el proyecto y la dirección de obra separado de la ejecución) utilizado para la gestión de un proyecto no funciona. La mayoría de los proyectos no cumplen en plazos, costes o calidad, pero se sigue utilizando el mismo modelo como si no hubiera otras opciones.
Nombre | Javier Arguedas Gutiérrez |
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Empresa | ILD |
Cargo | Lab Planner y cofundador |
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