La compañía reafirma previsiones para 2025 y eleva su guidance de caja libre hasta 425 millones.
Grifols registra un beneficio neto de 177 millones en el primer semestre de 2025, un 387,6% más que en 2024, según los resultados presentados por la multinacional de hemoderivados. El crecimiento se apoya en la excelente evolución del negocio de Biopharma, que creció un 8,2% a tipo de cambio constante, y en una ejecución sólida de su Plan de creación de valor, impulsado por la eficiencia operativa y el apalancamiento financiero.
Los ingresos totales alcanzaron los 3.677 millones de euros, un 7% más a tipo de cambio constante, mientras que el EBITDA ajustado se situó en 876 millones, un incremento del 12,7% con respecto al primer semestre de 2024. Esto se traduce en un margen del 23,8%, impulsado por la fortaleza de su cartera de productos y las iniciativas internas de mejora continua.
El flujo de caja libre antes de fusiones y adquisiciones mejoró sustancialmente, situándose en -14 millones de euros en el semestre, una mejora de 182 millones interanuales, gracias a una gestión eficiente del capital circulante y a la reducción de costes financieros. Grifols también redujo su ratio de apalancamiento hasta 4,2x, frente al 5,5x del mismo periodo del año anterior.
En el segundo trimestre, la compañía completó la exclusión de Biotest de la Bolsa de Fráncfort, elevando su participación hasta el 80,32%. Esta operación, valorada en 108 millones de euros, fue financiada íntegramente con recursos disponibles.
Además, Grifols declaró un dividendo de 0,15 euros por acción, subrayando su compromiso con el retorno al accionista. Para el CEO Nacho Abia, “este desempeño refleja la ejecución disciplinada del plan estratégico y el compromiso con soluciones innovadoras para los pacientes”.
Biopharma sigue siendo el motor de crecimiento, con especial protagonismo de las inmunoglobulinas (IG), que crecieron un 12,5%, y su versión subcutánea, con un espectacular 66% de crecimiento. La albúmina, tras la renovación de la licencia en China, muestra signos de recuperación.
La unidad de alfa-1 antitripsina creció un 4,8%, y Grifols mantiene su liderazgo con un 70% de cuota de mercado mundial. Además, se prevé el lanzamiento de su fibrinógeno en Europa en el último trimestre de 2025.
La división de Diagnostic creció un 2,8%, impulsada por el cribado molecular de donantes en EMEA y Asia-Pacífico, así como por soluciones de tipaje sanguíneo, que han recibido aprobación de la FDA para su producción en EE.UU.
Grifols reafirma su guidance financiero para 2025 y mejora la previsión de flujo de caja libre, que se espera se sitúe entre 375 y 425 millones de euros antes de fusiones y adquisiciones. La compañía también ha asegurado que el impacto de la depreciación del dólar será mínimo, gracias a la fortaleza operativa de su negocio.
Con una estrategia centrada en la generación de caja, el desapalancamiento financiero y la inversión en innovación, Grifols continúa consolidando su liderazgo mundial en medicamentos derivados del plasma, con una presencia global y un modelo de negocio verticalmente integrado que protege frente a riesgos arancelarios o regulatorios.
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